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Santuario De Ntra. Señora Del Carmen
Cuenta la leyenda que en el año de 1672 el terrible cuando supo que un barco cargado de oro zarpaba de Veracruz rumbo a España, decidió atacarlo, obligando al capitán a refugiarse en la barra de Nautla.
Al no encontrar el oro “Lorencillo” furioso mando matar al capitán y a sus marineros. Un marino escondió en la playa, e imploró a la Santísima Virgen del Carmen, si se salvaba, traer una imagen suya para ser venerada en estas tierras; poco tiempo después éste cumplió su promesa trayendo la imagen a Nautla donde en una pequeña ermita se veneró por mucho tiempo, y posteriormente fue trasladad a Teziutlán, hoy sede de la diócesis de Papantla.
En mayo de 1960 el S. Papa Juan XXIII accedió a la petición del Obispo de la diócesis de Papantla para consagrar oficialmente a la Virgen del Carmen como patrona a perpetuidad de la misma.
Esta capilla está construida sobre un pequeño cerro y está ubicada en el barrio del mismo nombre, uno de los más antiguos y tradicionales de Teziutlán. Fue construida en el siglo XVIII, de tipo colonial renacentista clásico. Antecede a la capilla una pequeña fuente de cantera y portada atrial, el acceso se marca con arco de medio punto y está flanqueado por pilastras, cuyas entrecalles contienen nichos vacíos.
En el interior tiene planta de cruz latina, destaca la escultura de la Virgen del Carmen traída de España en el siglo XIX, también es sobresaliente la decoración barroca dorada trabajada en madera. Esta joya de la arquitectura es considerada el único santuario de Latinoamérica con cuatro torres idénticas.
Las festividades en honor a la Virgen del Carmen comienzan el 6 de julio, con una procesión en la que miles de fieles la acompañan de su santuario hasta catedral, recorriendo algunas de las calles de los barrios más antiguos.
Diez días después es el regreso de la imagen a su morada, recorriendo de igual manera las calles de la ciudad hasta altas horas de la noche en una fiesta multicolor en la que las casas son adornadas para engalanar el paso de la Virgen y fuegos artificiales adornan el cielo desde su salida de la Sta. Iglesia Catedral hasta su llegada al Santuario del barrio del mismo nombre.
